Es casi inevitable bregar por el mundo de la música nacional sin que alguien te lo mencione. Es algo así como un fantasma, que espanta aquí, asecha allá, como si esperase por vos en las sombras. Cuando empezás a atar cabos, basta con seguir patrones, estrategias de redes y algunas activaciones para entender que en realidad es un elefante dentro de la habitación. Tenés que empujarlo para que te deje espacio dentro de la industria. Pero toca, y hay que hacerlo.
Confieso que a mí no me ha pasado. Nunca nadie me ha ofrecido colocarme en radios o llevarme a una lista de popularidad a cambio de dinero. De hecho, en el curso de "Marketing musical" recalco siempre que NO tenemos que pagar payola y enumero todas las razones de mercadeo y de fidelidad del fan para darme a entender. Y sí, nunca falta el que me señala cosas como "Es que a Alux es fácil meterlo en radios". Y la verdad es que no, no es fácil, con ninguna banda, pero al menos mientras más conocido seás, más apertura hay a tu propuesta.
Así pues, en estos cuatro años que tengo de dedicarme a esto he logrado colocar tres sencillos radiales de Alux en más de cinco radios nacionales: "Te Abrazaré", "Se Busca" y "Mi Primera Luz". De todas ellas, solo la primera entró a listas de popularidad, alcanzado el segundo lugar, allá por junio de 2014. Y no, no pagamos por eso. La misma gente, de manera desarticulada y desorganizada pidió la canción y logró colocarla durante 2 meses en rotación. El resto tuvo una presencia bastante aceptable, que fuimos midiendo y monitoreando en las vistas de YouTube y en la forma en la que la gente las pedía y cantaba en vivo. Los resultados saltan a la vista. Corresponden a una estrategia global.
Ahora bien, este año logramos meter canciones de Willian Ávalos, Razones de Cambio y La Katrina en diferentes radios. Y recalco, el asunto aquí no es que te coloquen en un par de radios para hacer entrevistas sino que las canciones entren en circulación y que las personas las pidan. En todos los casos, nunca se pensó en pagar por que se colocaran y la gente las pide si les gustan y sino, pues no.
Cosa muy diferente a la que se ve con algunos otros artistas, quienes de la noche a la mañana tienen cientos de fans en redes (comprados) que no se animan a hacer un concierto cobrado porque nadie llegaría y sacan sencillos que llegan al Top 1 de la listas, y aunque su canción suena constantemente durante el día, no ves personas reales pidiendo conciertos, ni asistiendo ni cantando sus canciones.
Desconozco cuánto se paga por payola, no sé quiénes son los que la cobran. Lo que sí puedo asegurarles es que lo que se desperdicia en eso bien podría invertirse en una buena estrategia de medios para llamar la atención de la audiencia y así impactar de manera adecuada.
Como digo en el título, la payola la he visto de reojo, sé que habita esta industria y que está ahí. Sin embargo, cuando los artistas pegan por su propio talento y por lanzar una buena canción en el momento adecuado, me alegro porque el esfuerzo es evidente. Y el resultado también. Como reflexión final también llamo su atención a lo siguiente: si todos nos negamos a pagar payola, se acaba ese tipo de lucro y quienes se encarguen de autorizar las propuestas, tendrán que escuchar todo lo que se les propone y decidir qué es lo mejor para sus radios. Eso hará más justa la industria y se destacará las mejores propuestas, las ideales, para cada estilo que programen las radios en el país.
¿Ustedes qué piensan de esto? ¿Les ha tocado? ¿Les han cobrado por programar su música?