jueves, 7 de marzo de 2013

Del #ArjonaFest y el público chapín

Ayer platicábamos con algunos colegas, publicistas, diseñadores, community managers y mercadólogos sobre el comportamiento del público con respecto a los dos eventos de moda: el TigoFest y el concierto gratuito de Ricardo Arjona. "El público de Guate es difícil", indicó un colega. Todos asentimos. Es impresionante las cosas que se escuchan, las excusas, las quejas y hasta los reclamos cuando se trata de ir a un concierto, se supone, a pasarla bien y a tener un momento de placentera apreciación musical. No era un focus group, era una simple plática entre cuatas y compañeros de trabajo y todos concluimos que la realización de eventos culturales en Guatemala presenta más retos que beneficios. ¿Quieren saber por qué?

"EL PÚBLICO DE GUATE ES DIFÍCIL"

Los RHCP y su pequeño público en Rusia


Por ahí de 1997 o 1998, miraba en la tele un concierto de los Red Hot Chilli Peppers en la Plaza Roja de Rusia. Reportaban 150 mil asistentes. "¡Algún día tendremos un show así en Guatemala! Quizá con una banda tan grande como los RHCP", pensé. Tuvieron que pasar 15 años para que sucediera, aunque ya han venido otros grupos legendarios, le atiné a la segunda de mis afirmaciones. Con la primera fallé y por mucho. Viene una banda legendaria, con más de 25 años de carrera exitosa. De esas bandas que no dejan de estar vigentes y han encontrado un balance de propuesta musical coherente y popularidad sin perder su identidad. ¿Y qué dice el público guatemalteco?

"Es que mucho sol", "Es que va a tocar Maná", "No tengo pisto, no voy a ir", etc., etc., etc. No hablo de personas mayores con responsabilidad de pagarle los estudios a los hijos, ni de las personas que tienen una hipotéca. Hablo de guatemaltecos capitalinos, con trabajo, cuya mayor responsabilidad es dónde ir a gastar su quincena cada viernes y sábado. Y ni siquiera lo digo porque sean los RHCP. Así fue con Megadeth, con Korn, con Héroes, con Metallica... gente que sé que pidió esos temas en la radio, que descargó el disco (porque obvio que no lo compró) y que casualmente vienen en un fin de semana y dicen "es que tengo un cumpleaños" y resulta que es del primero del sobrino del vecino. En fin...

"En Guate no tenemos cultura para festivales. Si no son bandas del mismo género, la gente no va", dijo otra amiga. Es cierto. Como músico he visto y he participado en festivales, en donde muchos solo van a ver a una banda y se retiran. Es más, hasta preguntan a qué horas toca una banda para no tener que "aguantar" a los demás. Y bueno, no nos quejamos de que aquí a Guate no vienen buenos artistas y que qué lástima que no vengan grandes grupos o músicos en su mejor época. Bueno, es como el huevo y la gallina, si la gente no paga y no asiste a los conciertos, ¿Qué productor se va a arriesgar a pagar por un artista caro si la gente no va?

Yo lo planteé en la conversación: "No conozco a nadie que realmente se emocione como yo antes de un concierto". Cuando vino Dream Theater yo programé mi semana para estar ahí a como diera lugar y era miércoles. Pero la gente sale con frases como "voy a ir a un chupe y si me da tiempo voy". ¿Y entonces? Y la de ausencia de dinero sí es un para mí la más burda de las indiferencias. La mayoría de la gente, de los jóvenes, de los que gustan de "ir a conciertos" gastan más en cerveza en tres fines de semana que la entrada a un concierto. ¿Entonces? Con ese tipo de mentalidad nunca van a venir buenas bandas. Y nuestra contradictoria actitud de ser apáticos cuando al fin viene una banda no va a traer más alternativa de que vengan los mismos artistas mexicanos cada dos años y nadie más.

LO QUE ES GRATIS SALE CARO



Y bueno. Fue una bomba. Hasta en la sopa me aparece una imagen, un post, una queja sobre personas que quieren que les regalen una entrada, una entrada GRATUITA para ir a ver a Ricardo Arjona. El dichoso concierto que va a ser en Cayalá se ha desbordado que uno se soprende de tanta onda, de tanto reclamo, de nuestro nacionalista público.

"Es que no me gano la entrada", "¿Por qué dicen que es gratis si no me he ganado ninguna entrada?" hasta he visto gente que promete no volver a tomar cierta bebida ni meter su dinero en cierto banco si no "les regalan una entrada". El desborde de lo contradictorio es que me he enterado de gente que está vendiendo las dichosas entradas... pero lo peor es que hay gente ¡PAGANDO! por las entradas gratuitas. En buen castellano, que la gente que no va a ver a nadie, que le duele pagar Q25 de cover para ver a una banda nacional en un barcito de la ciudad prefiere pagar cientos de quetzales por una entrada gratis. Y así, en la misma vía, gente que no va a pagar impuestos ni a hacer trámites por evitar colas, ahí los vemos saturando cuanta agencia bancaria posible con sus Q500 con tal de abrir su cuenta bancaria y obtener su entrada.

En fin, sin defender a los organizadores, que sean entradas gratis no significa que sean regaladas. Es una simple estrategia de marketing pero que los usuarios medio histéricos lo están tomando como un engaño personal. Y lo peor, quizá lleguen 40 mil felices afortunados, pero habrá otras decenas de miles de más que no volverán a tomar la gaseosa en su indignación tal. Y no digamos la avalancha de gente que invadirá la zona 15 para alcanzar a oír la voz del cantautor.

OK. Perfecto. Pues qué bueno, en realidad, semejante apoyo a nuestro embajador musical. De verdad me alegro por él. Pero vamos, los mismos que se quejan y están indignados parece que no comprenden que esa bebida y el famoso banco son quienes van a financiar la venida de Arjona, que si quieren que sigan viniendo artistas, lo mejor será apoyarlos y no criticar que no alcancen las entradas para todos. Es más, quizá nunca más vuelvan a traer un artista de "grolis" si arman lío por algo que yo supongo debemos estar agradecidos.

Ojalá así alegaran cuando nuestros organizadores de conciertos nos cobran el doble de precio por ver al mismo artista que lo que cobran en El Salvador, Honduras o Costa Rica.

PROPUESTA

Sé que algunos se van a sentir aludidos. Estoy seguro que muchos dirán "este solo alega y alega". Pues puede que sí. Pero talvez en el frenesí de su pasión por apoyar al músico nacional, al único que se apoya, a la gente, a la gran masa que le llamamos público se les olvida que no solo se trata de satisfacernos. Poco importa la apreciación de la música y del arte. Poco importa el esfuerzo, la organización y todos los pequeños detalles que implica organizar un concierto. Ellos solo quieren su entrada gratis, o que no tocara tal o cual artista en un festival.

Seamos más amigables con los músicos, seamos más abiertos de mente. Disfrutemos de las propuestas, vivamos los eventos culturales, musicales. No se trata de pedir de regalado porque es gratis. Ni de vender entradas que son GRATIS. Se trata de que vivamos una fiesta, que así es como se vive en otros lados. La gente disfruta de un evento y sobre todo, no se deja que una mala organización, que unos productores les vendan un espectáculo mediocre.

Seamos público crítico pero feliz. Qué bien que todavía se hagan conciertos masivos en Guate. Con todos los riesgos que implican (y ganancias económicas relativas), Construyamos público para que cada vez más buenos grupos vengan al país. Es la no humilde opinión de un músico.




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